El cuerpo humano es un conductor eléctrico; así, cuando tocamos una pantalla electrónica, esta puede detectar la variación de campo eléctrico, así como la posición de nuestro dedo y el tipo de contacto (el tiempo de contacto y el número de veces que hemos tocado la pantalla, por ejemplo).
El electroscopio, que es un detector de cargas eléctricas, pone de manifiesto el fenómeno siguiente: si tocamos con una varilla metálica o con la mano la bola de un electroscopio cargado, las láminas caen, es decir, se descargan (figuras A y B).
El sensor de contacto detecta si tocamos al sumobot rival.
Si tocamos la carcasa metálica de un horno microondas que tenga los cables de alimentación mal aislados y haciendo contacto, podemos experimentar una descarga eléctrica fuerte.
Si tocamos las paredes de la vasija podemos comprobar que está caliente.
Si tocamos las paredes del tubo de ensayo, podemos comprobar que está caliente.
Si tocamos los extremos del diapasón con los dedos, la bolita deja de oscilar, a la vez que cesa la emisión de sonido.
Los ejemplos de YourDictionary.com han sido recopilados de diversas fuentes para reflejar el uso actual e histórico de la lengua. Estos ejemplos no representan las opiniones de YourDictionary.com.