Abogó por el derecho de voto con independencia de la riqueza económica, la clase social o el sexo.
Aunque los requerimientos nutricionales dependen de diversos factores (edad, sexo y actividad), se calculan unas cantidades medias para tener una dieta equilibrada.
Con frecuencia la pirámide representa también el porcentaje según el sexo de cada grupo de edad.
Desde su inicio, la Iglesia ha seguido el ejemplo de su Maestro, defendiendo la igual dignidad de todos los seres humanos, sin considerar la raza, el sexo, las circunstancias económicas, la salud ni la edad.
Desequilibrada En este tipo de pirámide existe una desproporción en los grupos de edades o en el porcentaje según el sexo.
El embrión recibe el nombre de feto y ya se puede conocer su sexo.
El sexo Ser varón o mujer es un elemento fundamental de la persona, pero no da ningún privilegio o capacidad de dominio de unas personas sobre las otras.
En un individuo, la presión depende de diversos factores: unos son intrínsecos a la persona y no se pueden modificar fácilmente (el sexo, la edad, la elasticidad y diámetro de las arterias, la fuerza del corazón al bombear la sangre, etc.), y otros, en cambio, se pueden controlar (el peso, la dieta, la actividad física, el tabaco, el café, etc.).Para poder controlar si nuestra presión es correcta, se tiene que medir de manera regular.
Identificar y rechazar las situaciones de injusticia y discriminación relacionadas con el origen y el sexo, el nivel económico y las creencias.
La castidad requiere una profunda comprensión de la persona, del sexo opuesto, del valor del compromiso, del matrimonio y de la virginidad.
La reproducción sexual es la que se realiza mediante la unión de dos células especializadas de diferente sexo llamadas gametos.
Lo mismo ocurre en el ser humano: el sentido biológico del sexo es la propagación de la vida.
No depende de ninguna circunstancia (sexo, inteligencia, raza, edad, salud, etcétera).
No podrán ser fundamento de privilegio jurídico: la naturaleza, la filiación, el sexo, la clase social, la riqueza, las ideas políticas ni las creencias religiosas.
No puede haber distinción por raza, color, sexo, lengua, religión ni opinión.
No siempre gestionamos bien esta diversidad y surgen situaciones de injusticia y discriminación hacia algunas personas o colectivos a causa de su origen, sexo, nivel económico o social, creencias, etc. Analizaremos estas realidades y propondremos actitudes basadas en el respeto y encaminadas a construir una sociedad realmente abierta a todo el mundo.
Nuestro sexo es una característica de toda la persona que implica, evidentemente, los órganos sexuales, pero también los músculos, el sistema óseo, el cerebro, la química hormonal de nuestro cuerpo, su desarrollo, etc. Todas nuestras células llevan la marca del sexo en el último cromosoma: X o Y. Psicológicamente también hay aspectos que nos diferencian: la manera de razonar, la de sentir y expresar las emociones son diferentes.
Ordena los cambios sexuales que se producen durante la adolescencia, de más temprano a más tardío, para cada sexo.
Por tanto, independientemente de su sexo, quien tenga cualidades naturales para una determinada función, deberá desempeñarla.
Por lo mismo, una ley que diferenciara entre los derechos de las personas de una raza o de otra, de uno u otro sexo, sería contraria a los derechos humanos y a la igualdad de oportunidades.
Representa a Afrodita (Venus) disponiéndose a tomar su baño ritual y con su mano derecha no es seguro si se cubre el sexo con pudor o lo señala como fuente de su poder.
Se les emplea en todos [los tipos de trabajo], sin andarse con [...] distinciones [de edad o sexo], y es muy natural que así sea, pues los niños, a pesar de su escasa fuerza productora, tienen para el capitalista la doble ventaja de costar poco en el mercado de trabajo y contribuir con su presencia en él a abaratar el precio de alquiler del trabajo adulto.
Sufragio: sistema electoral que da derecho al voto a todos los ciudadanos adultos sin distinción de raza, sexo, creencia o posición social.
Todos hemos oído más de una vez chistes que se burlan de la raza o del sexo de sus protagonistas.
Todos los ciudadanos son iguales ante la ley, sin que quepa discriminación alguna por razón de sexo, raza, opinión, religión, origen social o cualquier otra circunstancia personal o social.
Todos tenemos el deber de respetar y cuidar la vida de los demás, más allá de toda circunstancia (inteligencia, sexo, salud, etnia…).
Universales Todas las personas son titulares de los mismos derechos humanos, independientemente de su raza, sexo, religión u origen étnico, cultura o cualquier otra circunstancia personal o social.
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