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30 oraciones y frases con quién

Las oraciones con quién que te presentamos a continuación te ayudarán a entender cómo debes usar quién en una frase. Se trata de ejemplos con quién gramaticalmente correctos que fueron redactados por expertos. Para saber cómo usar quién en una frase, lee los ejemplos que te sugerimos e intenta crear una oración.
  • ¿A quién se lo dijo?

  • ¿A quién piensas que se dirige?

  • ¿A quién te parece que se dirige?

  • ¿Con quién se encuentra?

  • ¿Con quién quiero compartirlo todo?

  • ¿De quién depende el bienestar de toda la humanidad?

  • Así pues, la pregunta clave no es si Jesús existió o no, sino quién fue realmente.

  • Así, por ejemplo, los ejércitos implican la existencia de una jerarquía y, con la jerarquía, las reglas para saber quién manda más y quién, menos.

  • Como eran gemelos y no se podía determinar quién era el primogénito, decidieron que los dioses tutelares de estos lugares escogieran mediante augurios quién debía dar nombre a la nueva ciudad y quién, después de fundarla, tenía que gobernarla con su autoridad.

  • Consulta en una enciclopedia quién fue el inventor de la bombilla eléctrica.

  • Decid a quién irá especialmente dirigido vuestro mensaje.

  • Explica qué o quién es verdaderamente libre.

  • Ha sido amado por sí mismo, no en general (a la especie humana), sino personalmente (al quién que es cada uno).

  • Indica en primer lugar quién se incluye como miembro de la clase.

  • La suroeste, que da a la calle, tiene un triple registro sobre las puertas de entrada: un friso de arcos de herradura entrecruzados, una red de rombos y una inscripción, descubierta en el siglo XIX y muy deteriorada, que data la obra e informa de quién la encargó y quiénes fueron sus constructores.

  • La implantación del microchip ha sido, además, una herramienta muy efectiva para evitar tanto el abandono de mascotas como el maltrato animal, ya que en todo momento se puede saber quién es el propietario del perro y sancionarlo en el caso de que lo haya abandonado o maltratado.

  • La pregunta por el quién no se responde, por lo tanto, con un concepto.

  • Lo fue ya desde sus comienzos, marcados por una larga y cruenta contienda civil, la primera guerra carlista, en la que se decidía en principio quién habría de ser el titular del trono: Isabel II, nombrada heredera por el difunto rey, o el hermano de este, Carlos María Isidro.

  • Los médicos no pueden decirle a un enfermo trasplantado quién fue el donante, ni informar a la familia del donante del destino del órgano que se ha trasplantado.

  • Ninguno de los dos tipos de dominio feudal se correspondía exactamente con el concepto capitalista de propiedad plena, por lo que se planteaba la disyuntiva sobre quién tenía más derecho a la tierra, si el señor o el campesino.

  • Por ahora todo son prototipos, pero, quién sabe, quizá en un futuro no muy lejano, cuando se agoten las pilas, podremos tirarlas al contenedor azul.

  • Por eso, cuando se desea conocer a una persona, no se pregunta por el qué, sino por el quién.

  • Por último, debemos enmarcar la obra dentro de su contexto histórico y social, informando sobre aspectos tales (si se conocen) como quién la encargó o financió, qué consideración social tenía el artista en su tiempo, cómo se refleja en ella cierta visión de la vida o del mundo, etc. Relación con su entorno natural.

  • Recuerda que deberás incluir qué productos son necesarios para cada tarea, qué se deberá hacer, quién la llevará a cabo y en cuánto tiempo.

  • Se ha convocado una reunión del Consejo Escolar, ¿a quién hay que enviarle un correo electrónico para que asista?

  • Si no tuviera la firme decisión inquebrantable de no unirme a otro alguno después del desengaño que sufrí con la muerte de mi primer amor, si no sintiese hastío del tálamo y las teas nupciales, a esta sola flaqueza, a esta sola pudiera, sí, quién sabe, haber cedido.

  • Si quieres hacerte socio de un club deportivo te pedirán el nombre, una fotografía y algunos datos más (edad, dirección, lugar de nacimiento, etc.), pero esta ficha sigue sin explicar quién eres tú: la realidad de cada persona es extraordinariamente compleja.

  • Sin Dios, la moral se reduce a buenas intenciones y su contenido básico puede cambiar según quién ejerza el poder.

  • Sin Dios, la moral se reduce a buenas intenciones y su contenido básico podrá cambiar según quién ejerza el poder o domine el arte de la retórica.

  • Un día, se encontraron y el emú le dijo al koala: ––Tenemos que resolver esta cuestión de una vez por todas, y ver finalmente quién tiene razón en nuestro debate.