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52 oraciones y frases con pintores

Las oraciones con pintores que te presentamos a continuación te ayudarán a entender cómo debes usar pintores en una frase. Se trata de ejemplos con pintores gramaticalmente correctos que fueron redactados por expertos. Para saber cómo usar pintores en una frase, lee los ejemplos que te sugerimos e intenta crear una oración.
  • A diferencia de los pintores que le precedieron, no buscaba la verosimilitud en sus aspectos formales.

  • A partir de entonces y como resultado de diversas infl uencias –los pintores venecianos de las colecciones reales, la visita de Rubens, sus dos viajes a Italia–, su estilo experimentó una evolución clara hacia composiciones más naturales, luces más matizadas, colores más fríos y una pincelada más suelta.

  • Admiraba a los grandes pintores barrocos, como Rubens, Rembrandt o Velázquez.

  • Allí desarrolló, junto a otros pintores de su círculo, el sintetismo formal, que se caracteriza por la simplificación del dibujo, con trazos gruesos que aíslan zonas de colores planos y brillantes, al modo de las vidrieras.

  • Aunque no quiso formar parte del círculo de pintores impresionistas, en cuyas exposiciones colectivas nunca participó, su obra fue para ellos objeto de admiración y punto de referencia, por lo que se le puede considerar, en cierto modo, el inspirador del nuevo estilo.

  • Aunque el término se ha instaurado definitivamente en la historiografía del arte, incluyendo con frecuencia en él a los neoimpresionistas y a otros grandes pintores, como ToulouseLautrec, no deja de ser una categoría imprecisa que no permite una caracterización general.

  • Aunque la escultura siguió un desarrollo a veces paralelo al de la pintura –algunos pintores fueron también escultores, como Picasso o Boccioni–, no siempre resulta fácil clasificarla dentro de los grandes «ismos» pictóricos, no solo por la dificultad que entrañaba adaptar sus postulados a la escultura, sino también porque los escultores, más aún que los pintores, modificaron continuamente su propio lenguaje.

  • Como los pintores realistas, los impresionistas renegaron de los grandes temas y fijaron su atención en la realidad inmediata, pero a diferencia de ellos, renunciaron a cualquier mensaje de carácter social y, como en los grabados japoneses, recurrieron a temas banales y cotidianos.

  • De hecho, algunos historiadores incluyen a Van Gogh entre los pintores simbolistas.

  • Desde finales del siglo XIX hasta la Primera Guerra Mundial, el cartelismo fue obra esencialmente de pintores y, por tanto, su estética estuvo vinculada en muchos casos a las primeras vanguardias de las artes plásticas.

  • Destacaron literatos como Kafka, Sartre y Camus, escultores como Giacometti y pintores como F. Bacon.

  • El crítico de arte Louis LeRoy fue demoledor con la técnica empleada por estos pintores y, en referencia al título de una de las obras expuestas («Impresión, sol naciente», de Monet), les aplicó con desprecio el calificativo de impresionistas, que fue asumido por el grupo en una actitud de orgullo y rebeldía.

  • En las prósperas ciudades flamencas la burguesía se convirtió en una clientela habitual de los pintores, a los que encargaba retratos o trípticos religiosos destinados a sus oratorios y casas particulares, lo que explica su pequeño formato.

  • En cualquier caso, el Realismo, encabezado por un grupo reducido de pintores, no introdujo innovaciones formales, sino una provocadora revolución temática en un panorama general de artistas que, en el más puro academicismo, producían su obra para una burguesía ya claramente conservadora.

  • En definitiva, los pintores flamencos consiguieron ofrecer en sus obras una fiel imitación de la realidad tal como aparece ante nuestros ojos, mediante la observación atenta y la traslación al cuadro de todos sus detalles.

  • En este ámbito se distinguen dos grandes grupos de pintores: los que trabajaron en la decoración de El Escorial, muchos de origen italiano; y los retratistas de la corte, como Sánchez Coello.

  • En este marco destacaron dos grandes pintores barrocos, cuya obra se proyectó mucho más allá de Venecia: Tiepolo y Canaletto.

  • En la primera, para la cual algunos pintores utilizaban la técnica del temple, se define el dibujo, las zonas de luces y sombras, y una primera distribución de colores; y en la segunda se matizan las tonalidades.

  • En su pintura el contenido es más importante que la forma, por lo que su estilo es más bien arcaico y contrasta con los otros pintores flamencos.

  • Entre los muy valiosos artistas españoles contemporáneos, te indicamos a continuación algunos de los más reconocidos: los pintores Eduardo Arroyo, Juan Genovés y Miquel Barceló ; los escultores Eduardo Chillida, Jorge de Oteiza y Susana Solano ; y los arquitectos Francisco Javier Sáenz de Oiza, Rafael Moneo y Santiago Calatrava .

  • Entre los pintores que hacia mediados de siglo más acusaban la in fl uencia de los maestros italianos destacaron el valenciano Juan de Juanes y el extremeño Luis de Morales «el Divino» .

  • Era una reacción contra el culto del futurismo a la velocidad y el movimiento; y frente al optimismo de este, expresaba la soledad y melancolía de un reducido grupo de pintores que coincidieron en la ciudad de Ferrara.

  • Eran dos pintores de personalidad muy diferente, pero con un rasgo en común: su visión de la naturaleza era el emocional reflejo de un estado de ánimo, acorde con el tormentoso espíritu del Romanticismo, y dejaba atrás definitivamente la representación idealizada que había caracterizado al paisaje hasta entonces.

  • Es por esto que tales historiadores establecen en David el arranque de un «Romanticismo de la línea», que solo en lo formal se distingue del Romanticismo del color de los grandes pintores del primer tercio del siglo, considerados tradicionalmente como únicos y verdaderos representantes del movimiento romántico.

  • Estuvo en Italia, donde admiró la obra de Miguel Ángel y los pintores barrocos, y en Londres, donde retrató la miseria resultante de una industrialización deshumanizada, anticipándose con ello al Realismo.

  • Fotografía y grabados japoneses influyeron decisivamente, junto a otros factores, en la mayoría de los pintores impresionistas.

  • Igualmente diversos fueron los estilos personales de los pintores simbolistas (Puvis de Chavannes, Odilon Redon, Gustave Moreau), algunos de ellos dentro del más puro academicismo.

  • La decoración de este Salón se encargó a los mejores pintores españoles e italianos, cuyas obras conmemoraban las grandes victorias de la monarquía española.

  • La escuela sienesa, en cambio, con pintores como Duccio o Simone Martini, se interesó menos por las formas naturales que por crear un estilo refinado y elegante, que desarrollaba la tradición del Gótico lineal, empleando a menudo los tradicionales fondos dorados.

  • La escultura africana, que deja su impronta en las dos figuras de la derecha, cuyos rostros nos recuerdan las máscaras de ese arte primitivo que tanta admiración estaba despertando en las nuevas generaciones de pintores.

  • La estética renacentista se introdujo en la pintura española por las mismas vías que señalábamos para la escultura: importaciones de Italia, presencia en España de pintores italianos y viajes a Italia de pintores españoles.

  • La pintura hispano-flamenca A mediados del siglo se introdujo en España la influencia flamenca con sus innovaciones en el plano formal –detallismo, interés por el paisaje, etc.– y técnico –pintura al óleo–. Llegó a través de las numerosas obras que se importaron de aquellos territorios, pero también con la presencia de artistas flamencos en España; y en algunos casos, mediante la formación directa de pintores españoles en los grandes centros flamencos de producción artística.

  • La propuesta surrealista del automatismo psíquico, unida al interés por la abstracción de muchos de estos pintores, dio como resultado este estilo, que se puede considerar el primero genuinamente norteamericano.

  • Las nuevas generaciones de pintores consideraban superado el Impresionismo y, aunque admiraban a los postimpresionistas, los consideraban meros iniciadores de una andadura que estaba por completar.

  • Los había tallistas de madera, orfebres o miniaturistas, pero los principales eran los pintores, los canteros (escultores) y los maestros de obras, estos últimos equivalentes a arquitectos, aunque sus conocimientos eran de tipo práctico y trabajaban sin diseños previos ni maquetas.

  • Los pintores del Hiperrealismo abarcan un amplio abanico temático (retratos, paisajes urbanos, naturalezas muertas, etc.) y trabajaban con frecuencia a partir de fotografías, que reproducían en sus lienzos con idéntico detalle, minuciosidad y frío distanciamiento.

  • Los pintores se identificaron, en general, con la poesía de estos autores y, más que un lenguaje formal específico, compartieron una actitud ante la vida, como los románticos.

  • No es de extrañar, por tanto, que Goya fuera admirado por tantos pintores vanguardistas de los siglos y, que vieron en él a un genio inclasificable y precursor de todos ellos.

  • Nos han llegado referencias y nombres de algunos pintores famosos (Apolodoro, Polignoto, Apeles, el ya citado Nicias).

  • Pero desde el siglo este panorama empezó a cambiar a partir de dos escuelas principales, la sienesa y la florentina, que alcanzaron en la centuria siguiente ( Trecento o siglo ) su pleno desarrollo: La escuela florentina tuvo su mejor representante en Giotto, uno de los grandes pintores de la historia universal, que superó el carácter lineal y plano de la pintura precedente para dotar a sus composiciones de volumen y profundidad mediante una aplicación natural de la luz y el color (modelado).

  • Poco después de su muerte, falleció también el rey, Felipe IV, y los nuevos retratistas de Carlos II, siendo grandes pintores, en especial Claudio Coello, no alcanzaron la maestría y genialidad de su antecesor.

  • Rechazaban la pintura coetánea alemana y sentían una gran admiración hacia Munch, Van Gogh y Gauguin, entre los pintores más recientes, y hacia el arte medieval alemán y el arte primitivo de África y Oceanía.

  • Se las suele agrupar bajo el término genérico de simbolismo, aunque no todos los historiadores se ponen de acuerdo a la hora de definirlo y asociarlo a unos pintores u otros.

  • Se trata de una pintura al óleo sobre tabla, pues desde mediados de siglo la influencia de los pintores flamencos había extendido por Italia esta técnica.

  • Si las dificultades agudizan el ingenio, esto fue sin duda lo que ocurrió en la España del siglo, sobre todo en los ámbitos de la literatura y la pintura, con escritores de la talla de Cervantes, Lope de Vega, Quevedo, Góngora y Calderón de la Barca; o pintores como Velázquez, uno de los grandes genios del arte europeo de todos los tiempos.

  • Sin embargo, los primeros fotógrafos arrastraron un cierto complejo de inferioridad respecto a los pintores (el mérito parecía corresponder a la máquina más que a la labor del fotógrafo) y muchos de ellos cayeron en lo que se ha denominado pictorialismo, que consistía en dar a la fotografía el aspecto propio de una pintura, coloreándola y buscando encuadres y efectos tomados del lenguaje pictórico.

  • Su formación seguía siendo tradicional, en el taller de un maestro arquitecto o en la Academia correspondiente, como los pintores y escultores, y estaba basada en el tratado clásico de Vitruvio y en los elaborados desde el Renacimiento.

  • Su principal fuente de inspiración, entre los pintores flamencos, fue Roger van der Weyden, del que tomó su dramatismo y expresividad, como se aprecia claramente en la Piedad, obra de procedencia desconocida.

  • También en Inglaterra, la gran potencia económica, surgió un interesante grupo de pintores que, atendiendo a las demandas de la burguesía y al margen de la tradición clásica, renovaron algunos de los considerados entonces géneros menores, como el retrato o el paisaje.

  • Tres años después, la búsqueda de ambientes primitivos donde reencontrarse con formas de vida sencillas le indujo a abandonar a su familia y establecerse en Bretaña, donde pronto se convirtió en el líder del grupo de pintores de la pequeña localidad de Pont-Aven.

  • Uno de los pintores florentinos más representativos de esta generación fue Sandro Botticelli.

  • Velázquez, además de pintar a la familia real y a otros personajes importantes, realizó también una serie de retratos de bufones u «hombres de placer», como se los denominaba entonces, siguiendo una larga tradición de los pintores de Corte.