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10 oraciones y frases con disputa

Las oraciones con disputa que te presentamos a continuación te ayudarán a entender cómo debes usar disputa en una frase. Se trata de ejemplos con disputa gramaticalmente correctos que fueron redactados por expertos. Para saber cómo usar disputa en una frase, lee los ejemplos que te sugerimos e intenta crear una oración.
  • A raíz de una disputa, Remo atravesó el surco sin respetar su carácter sagrado y desafió a su hermano.

  • De esta forma, aunque la disputa se centraba en las relaciones entre el papado y el emperador, Ockham propuso la separación entre cualquier tipo de poder civil y religioso.

  • Dentro del complejo programa iconográfico que se despliega en la sala, destacan las dos grandes pinturas murales dispuestas en paredes enfrentadas: en una se representa «La Disputa del Sacramento»; y en la otra, «La Escuela de Atenas».

  • El principal motivo de disputa era la posesión de la isla de Sicilia, que acabó en manos de los romanos.

  • En una de sus paredes la belleza se simboliza con una pintura del Parnaso; en la pared de enfrente, las Virtudes y la Ley aluden a la bondad y la justicia; por último, en las otras dos paredes, a su vez enfrentadas entre sí, se hace referencia a la verdad a través de dos temas: la Disputa del Santo Sacramento (o Triunfo de la Religión), que simboliza la verdad revelada por la fe y transmitida por el cristianismo; y la pintura aquí comentada, «La Escuela de Atenas», que alude a la verdad alcanzada a través de la filosofía y la razón.

  • Intentando evitar ese destino y, pensando que sus padres eran los reyes de Corinto, Edipo huyó hacia Tebas y por el camino mató a su padre en una disputa.

  • La escena representada procede de Tito Livio, que narra el modo como decidieron las ciudades de Alba y Roma en el siglo a.C. resolver la disputa entre ellas mediante el combate entre miembros de una familia de cada ciudad.

  • Los dos frontones describen sendos pasajes relativos a Atenea: su nacimiento, en el oriental; y su disputa con Poseidón por el patronazgo de Atenas, en el occidental.

  • Una versión dice que lo hizo su madre porque era muy feo; otra asegura que lo hizo Zeus para defender a su madre en una disputa conyugal.

  • Ya san Agustín había empleado un razonamiento semejante en su disputa con los escépticos cuando a fi rmó «si me engaño, existo».