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10 oraciones y frases con amores

Las oraciones con amores que te presentamos a continuación te ayudarán a entender cómo debes usar amores en una frase. Se trata de ejemplos con amores gramaticalmente correctos que fueron redactados por expertos. Para saber cómo usar amores en una frase, lee los ejemplos que te sugerimos e intenta crear una oración.
  • El «columpio», cuyo título completo era «Los felices azares del columpio», es un fiel reflejo del gusto aristocrático por todo lo relativo a actitudes desenfadadas y amores prohibidos, en un ambiente de frivolidad que trataba de compensar los matrimonios impuestos y concertados por interés.

  • El cuadro representa el momento en que Apolo informa a Vulcano, dios herrero y aquejado de cojera, de los amores adúlteros de Venus, su esposa, con Marte, el dios de la guerra, provocando la sorpresa en todos los presentes.

  • En un primer plano, oscuro y más definido, aparecen cinco hilanderas, mientras en el fondo, sobreiluminado y de menor nitidez, Minerva (con casco guerrero) se dirige a Aracne en presencia de tres mujeres, ante un tapiz que es una copia de Tiziano y representa uno de los amores adúlteros de Júpiter, el rapto de Europa.

  • Es la diosa de la belleza y tiene muchos amores (engaña a su marido Hefesto, especialmente con Ares).

  • Los temas se centran en amores románticos, situaciones llenas de equívocos y aventuras.

  • Para ello elaboró un tapiz que representaba los castigos que los dioses infligían a los mortales que los desafiaban, a lo que Aracne respondió realizando otro con los amores escandalosos de los dioses.

  • Se impuso así la moda de los retratos en actitudes y ambientes familiares, los cuadros de escenas mitológicas de amores entre dioses o héroes, o las fiestas galantes, género que surgió en Francia y tuvo un extraordinario éxito y magníficos cultivadores.

  • También expone sentimientos íntimos, incluidos amores y odios, con frecuencia en un tono burlesco o con dobles sentidos.

  • Todo el programa iconográfico gira en torno a los amores de los dioses paganos, tema más propio del Renacimiento que del Barroco, lo que solo se explica por tratarse de la decoración de un ambiente privado.

  • Un conocido refrán resume la misma idea de este modo: «Obras son amores y no buenas razones».